A todos los que entreis en mi blog.

Sólo deciros que busquéis la belleza que hay en las pequeñas cosas de la vida como por ejemplo: una canción, un poema, un sueño... Es lo único que nos quedará dentro de nuestra mente. Ya que vivimos todavía en este asqueRoso mundo. Donde aún permitimos que los niños se mueran de hambre porque no tienen comida para darle sus madres. ¡ES UNA VERGUENZA! Todos debemos intentar hacer algo por ellos, aunque sea una mínima ayuda, cada uno con lo que pueda, ya sabemos que todo se mueve con el asqueroso dinero. Constribuyamos con lo que podamos. Ellos nos lo agradecerán.
"Buscad la belleza porque es la única forma de vivir en este asqueroso mundo". Qué a la misma vez es bello.
Adios a todos los amigos y amigas que veáis mi blog. Que el transcurrir de vuestras vidas o traiga grandes alegrías. Siempre después de las tristezas llega la luz. Sólo hace falta resisitir. Ya lo dice el poeta "Rainer Maria Rilke". Poeta de lo visible a lo invisible. "Estar aquí es maravilloso". Vamos a aprovecharlo una vez que nos han dado la vida.

LA VIDA

MAS DE QUE SIRVEN NUESTRAS VIDAS
SI NO ENRIQUECEN A OTRAS VIDAS

José Hierro

viernes, 28 de mayo de 2010

PSICOPATIA

PSICOPATIA

El parque se despierta, rie y canta
en la frescura matinal... La niebla,
donde saltan aéreos surtidores,
de arcos iris se puebla
y en luminosos velos se levanta.
Su olor esparcen entrearbiertas flores,
suenan en las ramas verdes pío pío
de los alados huspedes cantores,
brilla en el césped húmedo el rocío...
¡Azul el cielo! ¡Azul!... Y la suave
brisa que pasa, dice:
¡Reid! ¡Cantad! Amad! ¡La vida es fiesta!
¡Es calor, es pasión, es movimiento!
Y forjando en las ramas una orquesta,
con voz grave lo mismo dice el viento
y, por el entre el sutil encantamiento
de la mañana sonrosada y fresca,
de la luz, de las yerbas y las flores,
pálido, descuidado , soñoliento,
sin tener en la boca una sonrisa
y de negro vestido
un filósofo joven se pasea,
olvida luz y olor primaverales,
e impertérrito sigue en su tarea
de pensar en la muerte, en la conciencia
y en las causas finales.
Lo sacuden las ramas de azalea,
dádonle el aire el aromado aliento
de las rosadas flores,
lo llaman unos pájaros, del nido
do cantan sus amores,
y los cantos risueños
van por entre el follaje
estremecido
a suscitar voluptuosos sueños
y él sigue su camino, triste, serio
pensando en Fichete, en Kant, en Vogt, en Hegel,
¡ y del yo complicado en el miserio!

La chicuela del médico que pasa,
una rubia adorable, cuyos ojos
arden como una brasa,
abre los ojos húmedos y rojos
y le pregunta al padre; enternecida...
-Aquel señor, papa, ¿de qué está enfermo,
que tristeza le anubla así la vida?
Cuando va a casa a verle a usted, me duermo;
tan silencioso y triste... ¿qué mal sufre?...

... Una sonrisa el profesor contiene,
mira luego una flor, color de azufre,
oye el canto de un pájaro que viene,
y comienza de pronto, con descaro...
-Ese señor padece un mal raro
qie ataca rara vez a las mujers
y poca a los hombres..., ¡hija mia!
Sufre ese mal: ... pensar...; es la causa
de su grave y sutil melancolía...
El profesor después hace una pausa
y sigue... -En las edades
de bárbaras naciones,
serias autoridades
curaban ese mal dando cicuta,
encerrando al enfermo en las prisiones
o quemándolo vivo... ¡Buen remedio!
Curación decisiva y absoluta
que cortaba de lleno la disputa
y sanaba al paciente... Antes... Ahora
el mal reviste tantas formas graves,
la invasiión se dilata aterradora
y no lo curan polvos ni paisajes;
en vez de prevenirlos los gobiernos
lo riegan y estimulan,
tomos gruesos, revistas y cuadernos
revuelan y circulan
y dispersan el germen homicida...
El mal, gracias Adios, no es contagioso
y lo adquieren muy pocos en la vida,
sólo he curado a dos... Les dije:
" Mozo, vayase usted a trabajar, de lleno,
en una fragua negra encendida
o en un bosque espesísimo y serenos;
machaque hierro hasta arrancarle chispas
o tumbe viejo troncos seculares
y logre que lo piquen las avispas;
si lo prefiere usted, cruce los mares
de grumete en un buque, duerma, coma,
muévase, grite, forcejee y sude,
mire la tempestad cuando se asoma,
y los cables de popa ate y anude
hasta hacerse diez callos en las manos
y limpiarse de ideas el cerebro..."
Ellos lo hicieron y volvieron sanos...
"Estoy tan bien doctor..." -Pues lo celebro!
Pero el joven aquél es caso grave,
como conozco pocos,
más que cuantos nacieron piensa y sabe;
ira a pasar diez años con los locos
y no se curará sino hasta el día
que duerma a sus anchas
en una angusta sepultura fría,
lejos dle mundo y de la vida loca,
entre un negro ataúd de cuatro planchas,
¡con un montón de tierra entre la boca!

José Asunción Silva


Que no nos pase esto de tanto pensar. Cuando haya que pasárselo bien pues a pasárselo que sólo tenemos una vida y hay que ser todo lo posible feliz en ella.