A todos los que entreis en mi blog.

Sólo deciros que busquéis la belleza que hay en las pequeñas cosas de la vida como por ejemplo: una canción, un poema, un sueño... Es lo único que nos quedará dentro de nuestra mente. Ya que vivimos todavía en este asqueRoso mundo. Donde aún permitimos que los niños se mueran de hambre porque no tienen comida para darle sus madres. ¡ES UNA VERGUENZA! Todos debemos intentar hacer algo por ellos, aunque sea una mínima ayuda, cada uno con lo que pueda, ya sabemos que todo se mueve con el asqueroso dinero. Constribuyamos con lo que podamos. Ellos nos lo agradecerán.
"Buscad la belleza porque es la única forma de vivir en este asqueroso mundo". Qué a la misma vez es bello.
Adios a todos los amigos y amigas que veáis mi blog. Que el transcurrir de vuestras vidas o traiga grandes alegrías. Siempre después de las tristezas llega la luz. Sólo hace falta resisitir. Ya lo dice el poeta "Rainer Maria Rilke". Poeta de lo visible a lo invisible. "Estar aquí es maravilloso". Vamos a aprovecharlo una vez que nos han dado la vida.

LA VIDA

MAS DE QUE SIRVEN NUESTRAS VIDAS
SI NO ENRIQUECEN A OTRAS VIDAS

José Hierro

domingo, 29 de mayo de 2011

366

366

Todo esfuezo, cualquiera que sea el fin hacia el que tienda, sufre, al manifestase, los desvios que la vida impone; se convierte en otro esfuerzo, sirve a otros fines, consuma a veces exactamente lo contrario de lo que pretendia realizar. Sólo un bajo fin merece la pena, porque sólo un bajo fin se puede realizar enteramente. Si quiero emplear mis esfuerzos en amasar una fortuna podré encierto modo amasarla; el fin es bajo, como todos los fines cuantitativos, personales o no, y es alcanzable y verificable. ¿Pero cómo he de efectuar el intento de servir a la patria, o engrandecer la cultura humana, o mejorar la humanidad? Ni puedo tener la certeza de los procedimientos, ni la verificación de los fines; (...)

Libro del desasosiego

lunes, 23 de mayo de 2011

FELICIDAD

FELICIDAD


canto a la vida porque estaba muerto
el cielo se abre ante mí para darme si
felicidad después de muchos años sin

haberla tocado ahora la toco a cada
instante ella ha venido a mí después

de muchas años no verla y de haber


pasado muchas penalidades alegrías
ellas han llegado a mí para no irse nunca
más hasta que haga el gran viaje para

estar allí con mis amigos y el gran... que
vendrá un día para estar conmigo siempre
ya aquí felicidad donde estabas escondida

tantos días y años pero no importa ahora
estás aquí ya en mi corazón que se abre
a la vida de la tierra gracias felicidad
por estar aquí mi niña bonita querida sí
gracias felicidad por haber llegado a todo mí
cuerpo repartiré un poco de felicidad con mí
corazón a la gente que me quiera como soy
no hay maldad dentro de mi corazón no la hubo

[nunca


¡VIVA LA FELICIDAD!

domingo, 22 de mayo de 2011

283

283

Soy una de esas almas que las mujeres dicen que aman, y nunca reconocen cuando las encuentran; de esas que, si ellas las reconocen, incluso así no las reconocen. Sufro la delicadeza de mis sentimientos con una atención desdeñosa. Poseo todas las cualidades por las que son admirados los poetas romanticos, incluso esa falta de esas cualidades mediante la cual se es /realmente/ poeta romántico. Me encuentro descrito (en parte) en varias novelas, como protagonista de varios enredos; pero lo esencial de mi vida, lo mismo que de mi alma, es no ser nunca protagonista.
No tengo una idea de mí mismo; ni la que consiste en una falta de idea de mí mismo. Soy un nómada de la conciencia de mí mismo./ Se descarriaron durante la 1ª guardia los rebaños de mi riqueza intima./
La única tragedia es no poder concebirnos trágicos. He visto siempre claramente mi coexistencia con el mundo. Nunca he sentido con claridad mi falta de coexistir con él; por eso nunca he sido normal.
Hacer es descansar.
Todos los problemas son insolubles. La esencia de que haya un problema es que no hay una solución. Buscar un dato significa no haber un dato. Pensar es no saber existir.

Fernando Pessoa - Libro del desasosiego

viernes, 13 de mayo de 2011

251

251

He vivido, durante unas horas incógnitas, momentos sucesivos sin relación, en el paseo en que he ido, a la orilla solitaria del mar. Todos los pensamientos, que han hecho vivir a hombres, todas las emociones, que los hombres han dejado de vivir, han pasado por mi mente, como un resumen de la historia, es esta meditación mía andada a la orilla del mar.
He sufrido en mí, conmigo, las aspiraciones de todas las eras, y conmigo se han paseado, a la orilla del mar, los desasosiegos de todos los tiempos. Los que los hombres quisieron y no hicieron, los que mataron al hacerlo, los que las almas fueron y nadie dijo: de todo esto se ha formado el alma sensible con que he paseado de noche a la orilla del mar. Y lo que los amantes extrañaron en el otro amante, lo que la mujer oculto siempre al marido de quien es, lo que la madre piensa del hijo que no ha tenido, lo que tuvo forma solamente en una sonrisa o en una oportunidad, en el tiempo que no fue éste o en una emoción que falta -todo esto, en mi paseo a la orilla del mar, ha ido conmigo y ha vuelto conmigo, y las olas retorcian magnamente el acompañamiento que me hacía dormirlo.
Somos quien no somos, y la vida es veloz y triste. El ruido de las olas por la noche es un ruido de la noche; ¡y cuántos lo han oído en su propia alma, como la esperanza constante que se deshace en la oscuridad como un ruido sordo de espuma profunda! ¡Qué lágrimas lloraron los que obtuvieron, qué lágrimas perdieron los que consiguieron! Y todo esto, durante el paseo a la orilla del mar, se me tornó el secreto de la noche y la confidencia del abismo. ¡Cuántos somos! ¡Cuántos nos engañamos! ¡Qué mares suenan en nosotros, en la noche de ser nosotros, por las playas que nos sentimos en los encharcamientos de la emoción!
Lo que se ha perdido, lo que se debería haber perdido, lo que se ha conseguido y ha satisfecho por error, lo que amamos y perdimos y, después de perderlo, vimos. amándolo por haber tenido, que no lo habiamos amado; lo que creíamos que pensábamos cuando sentíamos; lo que era un recuerdo y creíamos que era una emoción; y el mar en todo, llegando allá, rumoroso y fresco, del gran fondo de toda la noche, a agitarse fino en la playa, en el decurso nocturno de mi paseo a la orilla del mar...
¿Quién sabe siquiera lo que piensa, o lo que desea? ¿Quién sabe lo que es para sí mismo? ¡Cuántas cosas sugiere la música y nos sabe bien que no puedan ser! ¡Cúantas recuerda la noche y lloramos, y no han sido nunca! Como una voz suelta de la paz tumbada a lo largo, el enrollamiento de la olla estalla y se enfría y hay un salivar audible por la playa invisible.
¡Cuánto me muero si siento por todo! ¡Cuánto siento si así vagabundeo, incorpóreo, y humano, con el corazón parado como una playa, y todo el mar de todo, en la noche que vivimos alto, zumbón, y se enfría en mi eterno paseo a la orilla del mar!


Libro del desasosiego . Fernando Pessoa. Poeta.


Obra de arte escrita con palabras que llegan al corazón si dejas que tu sensiblidad de alma brille con toda su luz desde tu mente hasta el corazón.

Giovanni

miércoles, 11 de mayo de 2011

224

224

El aslamiento me ha tallado a su imagen y semejanza. La presencia de otra persona -aunque sea de una sola persona- me atrasa inmediatamente el pensamiento y, al paso que en el hombre normal el contacto con otro es un estímulo para la expresión y para el dicho, en mí, ese contacto es un contraestímulo, si es que esta palabra compuesta es viable ante el lenguaje. Soy capaz, a solas conmigo, de idear muchas frases ingeniosas, respuestas rapidas a lo que nadie ha dicho, fulguraciones de una sociabilidad inteligente con persona ninguna; pero todo eso se me esfuma si estoy ante un otro físico, pierdo la inteligencia, dejo de poder decir, y, al final de unos cuartos de hora, sólo siento sueño. Sí, hablar con gente me da ganas de dormir. Sólo mis amigos espectrales e imaginados, sólo mis conversaciones resultantes del sueño tienen una verdadera realidad y un justo relieve, y en ellos el espíritu está presente como una imagen en un espejo.
Me pesa, además, toda idea de ser forzado a un contacto con otro. Una simple invitación a cenar con un amigo me produce angustia difícil de definir. La idea de una obligación social cualquiera -ir a un entierro, tratar con alguien de un asunto en una oficina, ir a esperar en la estación a una persona cualquiera, conocida o desconocida-, sólo esa idea me estorba los pensamientos de un día, y a veces me preocupo desde la misma vispera, y duermo mal, y en el caso real, cuando sucede, es absolutamente insignificante, no justifica nada; y el caso se repite y yo no aprendo nunca a aprender.
"Mis habitos son de la soledad, que no de lo hombres", no sé si fue Rousseau, si Senancour, el que dijo esto. Pero fue un espíritu de mi especie, no podré decir, quizás de mi raza.

Fernando Pessoa - Libro del desasosiego.


Entra en el mundo de Fernando Pessoa y ya no serás igual sino que serás mejor persona sino lo eres ya.

Giovanni

viernes, 6 de mayo de 2011

De EL GUARDADOR DE REBAÑOS

13


El Tajo es más bello que el río que corre por mi aldea,
pero el Tajo no es más bello que el río que corre por mi aldea
porque el Tajo no es el río que corre por mi aldea.

El Tajo tiene grandes navíos
y todavía navega en él,
para quienes en todo ven lo que ya no existe,
la memoria de la naos.

El Tajo baja de España
y el Tajo entra en el mar de Portugal.
Todo el mundo lo sabe.

Pero pocos saben cuál es el río de mi aldea
y para dónde va
y de que sitio viene.
Y por eso, porque pertenece a menos gentes,
es más libre y mayor río de mi aldea.

Por el Tajo va el Mundo.
Más alla del Tajo está América
y la fortuna de quienes la encuentran.
Nadie ha pensado nunca en lo que hay más alla
del río de mi aldea.

El río de mi aldea no hace pensar en nada.
Quien se encuentra a su lado, sólo a su lado está.


Alberto Caeiro




¿Cuál es río de tu aldea? Porque todos tenemos nuestro río que nos riega nuestra aldea de nuestra vida desde que nacemos. El río sigue hasta la desembocadura donde un día hemos de partir. Entonces haremos balance y debemos decirnos yo he sido feliz. Pasado paso. Presente se hace día a dia. Futuro no sabemos que será...

Giovanni