A todos los que entreis en mi blog.

Sólo deciros que busquéis la belleza que hay en las pequeñas cosas de la vida como por ejemplo: una canción, un poema, un sueño... Es lo único que nos quedará dentro de nuestra mente. Ya que vivimos todavía en este asqueRoso mundo. Donde aún permitimos que los niños se mueran de hambre porque no tienen comida para darle sus madres. ¡ES UNA VERGUENZA! Todos debemos intentar hacer algo por ellos, aunque sea una mínima ayuda, cada uno con lo que pueda, ya sabemos que todo se mueve con el asqueroso dinero. Constribuyamos con lo que podamos. Ellos nos lo agradecerán.
"Buscad la belleza porque es la única forma de vivir en este asqueroso mundo". Qué a la misma vez es bello.
Adios a todos los amigos y amigas que veáis mi blog. Que el transcurrir de vuestras vidas o traiga grandes alegrías. Siempre después de las tristezas llega la luz. Sólo hace falta resisitir. Ya lo dice el poeta "Rainer Maria Rilke". Poeta de lo visible a lo invisible. "Estar aquí es maravilloso". Vamos a aprovecharlo una vez que nos han dado la vida.

LA VIDA

MAS DE QUE SIRVEN NUESTRAS VIDAS
SI NO ENRIQUECEN A OTRAS VIDAS

José Hierro

viernes, 14 de enero de 2011

MIS HIJOS ME TRAEN FLORES DE PLÁSTICO

MIS HIJOS ME TRAEN FLORES DE PLÁSTICO

Os enseñe muy pocas cosas.
(Se hacen proyectos..., se imagina..., se sueña...
La realidad es diferente.) Pocas cosas
os enseñé: a adorar el mar;
a sentir la alegría de ver vivir a una animal minúsculo;
a interpretar las palabras del viento;
a conocer los árboles, no por su frutos:
por sus hojas y por su rumor;
a respetar a los que dejan
su soledad en unos versos, unos colores, unas notas
o tantas otras formas de locura admirable;
a los que se equivocan con el alma.

Os enseñe tambiar a odiar
a la crueldad, a la avaricia,
a lo que es falso y feo, a las flores de plástico.

Febrero llueve sobre el cementerio.
Es una tarde de domingo. Gris
es todo. Hemos venido a enterrar a una criatura
tierna y absurda. Un ser que tal vez soñaría
con la inmortalidad. Trazaba rayas
sobre una plancha de metal, la mordía con ácidos...
Así evocaba a sus demonios, daba fe de su vida,
escribía sus sueños... (Humildemente
dejó pasar sus días. Sin fuego transcurrieron.)
Un pobre ser que ya descansa.

No dejó un hueco irrempazable
en el mundo. Quebró su muerte la perfección universal.
Muy pocos lo advirtieron. Recordarán algunos
de tarde en tarde, y sin dolor, que ya no existe.
Los menos que la lloran la olvidarán también.
Al fin quedó enterrada su carne. Ha vuelto a deshacerse.
Correrá con el agúa subterránea que la acompaña,
se deshará con gozo inútil en las cosas
sin dar siquiera un poco de carmín,
de aroma o balanceo a alguna flor de estío,
una flor verdadera, no de plastico, fea,
como aquellas que odiábamos, hijos míos.

Aquí me dejan bajo tierra. En una tarde de febrero.
Todo es negro cuando se van. Y mudo. Se ha extinguido
esa música gris que antes sonaba.
También el tiempo se ha borrado, y su sufrimiento,
de mi cuerpo. Ya el sufrimiento y el tiempo
van deshaciendo poco a poco lo que fue,
y tuvo fe y desánimo, fantasía y amor.
¡Qué pequeño es ahora, a esta distancia
absoluta el afán diario! ¡Qué pequeño lo grande,
lo grande aquello! ¡Qué pequeñas las iras
antes los hombres y sus actos!
¡Que pequeños los hombres, y qué necio
aquel errar buscando la verdad!
Como si hubiese una verdad tan sólo.
Como si una verdad fuera bastante
para darnos la vida.

Tarde se aprende lo sencillo.
Lo sabreís cuando un río de espanto se desboque
y arrastre vuestra luz, y la sepulte sin remedio.
Pense algún día que quien vive sólo un instante, nunca
puede morir. Quizá quise decir que sólo aquel que muere
un instante sabe lo nada que es vivir.
Mas nadie ha muerto nunca sino definitivamente.
Y entonces las palabras no tienen labios que las formen.

Tarde se aprende lo sencillo.
Tarde se encuentra la hermosura. No aquella de los ojos
mortales, la del mundo. No puedo hacer que lo entendáis.
Necesario sería que ahora estuvieseis aquí abajo
y que vieseis a vuestros hijos llegar entre las tumbas,
bajo la lluvia. y dejar su perfume y su presencia
en las tibias, alegres, inmortales
-más hermosas en vuestras manos que las del bosque-
flores de plástico.

José Hierro

En estos versos de "José Hierro" que hay que leer varias veces se resume lo que es la vida. En lo sencillo de la vida está todo. Sino hemos encontrado la sencillez de la vida. Sigamos en su busca pues la felicidad nos espera a todos. Buena busqueda a todos. Yo sólo quisierá decir si es de ayuda a quien lea éste maravilloso poema de un maestro. Que las pequeñas cosas de la vida como una buena canción o buen libro seguro que nos ayudan a todos. Buscádlos. Buena busqueda en vuestros caminos de la vida.

Giovanni