EL MERODEADOR
Merodeo en mi mente.
Me digo a mí mismo,
¿quién seré? Me dicen,
vuelvo a merodear en
mi alma y me digo no
sé lo que soy. Mas si
sé que la poesía me
lleva a mundos irreales,
reales, y en ellos vivo
por momentos hasta
volver a mi realidad de fe.
El parisino de París