A todos los que entreis en mi blog.

Sólo deciros que busquéis la belleza que hay en las pequeñas cosas de la vida como por ejemplo: una canción, un poema, un sueño... Es lo único que nos quedará dentro de nuestra mente. Ya que vivimos todavía en este asqueRoso mundo. Donde aún permitimos que los niños se mueran de hambre porque no tienen comida para darle sus madres. ¡ES UNA VERGUENZA! Todos debemos intentar hacer algo por ellos, aunque sea una mínima ayuda, cada uno con lo que pueda, ya sabemos que todo se mueve con el asqueroso dinero. Constribuyamos con lo que podamos. Ellos nos lo agradecerán.
"Buscad la belleza porque es la única forma de vivir en este asqueroso mundo". Qué a la misma vez es bello.
Adios a todos los amigos y amigas que veáis mi blog. Que el transcurrir de vuestras vidas o traiga grandes alegrías. Siempre después de las tristezas llega la luz. Sólo hace falta resisitir. Ya lo dice el poeta "Rainer Maria Rilke". Poeta de lo visible a lo invisible. "Estar aquí es maravilloso". Vamos a aprovecharlo una vez que nos han dado la vida.

LA VIDA

MAS DE QUE SIRVEN NUESTRAS VIDAS
SI NO ENRIQUECEN A OTRAS VIDAS

José Hierro

viernes, 31 de enero de 2020

DISCERNIR

Si importa, o no importa.
Tú sabrás discernir con el paso
del tiempo lo que es verdad
de lo que no es verdad.
Lo sabrás porque la vida,
te pondrá tantas veces a prueba.
Que lo que importa al estar ya
preparado, lo sabrás de lo que no.

Es ley de vida, que con copas
de sangre las bebes para regenerarte.

Hacia lo que importa de lo que no.

El parisino de París

 
ANUNCIADORES ALMENDROS EN FLOR

Por casualidad, hoy me asome
a mi ventana. Y si querer queriendo,
divise desde allí los almendros en flor
con su color blanco rosado en plena
estación invernal, anunciándonos lejanamente
pero no tan lejos que todo explotara a la vida
como año nuevo que hace a la nueva que vendrá.

El parisino de París


MI ALMA

¡Oh mi alma! Y la de todos.
Porque todos tenemos alma.
¿No será la de nuestros pensamientos
que van y vienen rodando por la ladera?
No lo sé, no lo sé, o es la que dicen
los cristianos que se evade de nuestros
cuerpos cuando la carne harina es.
Y sigo pensando con mi alma mía.

El parisino de París