TU REFUGIO
Mucho hay que vivir para llegar.
Para llegar mucho hay que vivir.
Ahora a lo mejor crees que has llegado.
Te queda un largo camino para llegar.
No has vivido todo que lo tienes que vivir.
Aunque lo creas.
La ciudad no te perdonará si no lo has hecho.
Ahora sigue viviendo hasta que lo haga.
Entonces habrás llegado y no te hará falta.
Volverás a tu refugio donde vivir.
juan antonio garcía vidal